· Ser coherentes con la política de la calidad.· Ser medibles.· Tomar en cuenta los requisitos aplicables.· Ser pertinentes para lograr la conformidad de los productos o servicios y para el aumento de la satisfacción del cliente.· Ser objeto de seguimiento.· Comunicarse.· Actualizarse según corresponda.· Mejorar la producción de forma contínua.· Definir una estrategia sólida con el fin de trazar un plan de producción adecuado.